miércoles, 4 de julio de 2012

MI PRIMERA VEZ, CON DOS HOMBRES

Comenzare diciendo que soy de México DF y este relato me ocurrio en el estado de Yucatán, es veridico y fue mi primera experiencia sexual con alguien de mi mismo sexo.
Al segundo día de llegar a esa ciudad quise conocer una playa cercana y abordé un taxista para llegar.
El viaje fue muy ameno ya que el taxista comenzó a hacerme platica. Era un hombre bien parecido, alto, moreno simpático y muy agradable por los que cuando llegamos lo invité a comer algo y a tomar unas cervezas con el pretexto de que no quería estar solo y de que me sirviera de guía, el aceptó y nos pasamos como 3 horas charlando y recorriendo lo largo de la playa, la cual estaba llena de turistas por lo que él me comento que tenía una casa cerca que daba al mar, que podíamos comprar algo de tomar e irnos para allá, ya que el solo la ocupaba los fines de semana y la casa se encontraba sola. Acepté mas por las ganas de nadar, que por el morbo que me causaba estar con ese hombre a solas en su casa, estaba dispuesto a dejar que pasaran las cosas.
Al llegar nos preparamos unos tragos y nos dispusimos a meternos a nadar, para lo cual tuvimos que quedarnos en ropa interior, con lo cual pude ver que se le marcaba un enorme miembro, no se si fue por el calor de los tragos pero empecé a sentir una calor intensa y muchas ganas de probar esa inmensa herramienta.
No se si él lo notó, porque comenzó a hacerme preguntas de mis preferencias sexuales, y le confesé que algunas veces pensado en tener experiencias con hombre. Él me miró y me preguntó si lo haría con él, nuestros cuerpos ya estaban muy cerca y pude notar que su miembro comenzaba a despertar, por lo que comencé a sobarselo encima de la ropa. Él me dijo que entráramos a la casa para estar mas cómodos, al entrar se sentó en un sillón y yo me arrodille frente a él y comencé a pajearlo muy despacio.
Después me decidí y me lo lleve a la boca, era enorme con la cabeza muy roja, y la verdad se veía imponente. Fue muy rico sentir su calor y como palpitaba en mi boca, y para este momento ya no me importaba nada y solo me concentre en hacer un buen trabajo: lo besaba, lo recorría desde la punta hasta sus grandes huevos.
Estuve así como 20 minutos hasta que me agarró fuertemente de la cabeza y terminó en mi boca, y tuve que tragar todo ese rico semen que salio de él para no ahogarme. Era tanta mi excitación que no quise desperdiciar ni una sola gota y comencé a limpiarlo con mi lengua quería seguir disfrutando de ese rico sabor a hombre, después de un rato alguien toco a la puerta y me dijo que me tenía una sorpresa, era otro taxista, joven y muy bien parecido, nos saludamos y el primero me dijo que ahora se lo mamara a su amigo, yo voltee a verlo y este asintió tocándose la verga por lo que yo me dispuse a hacer mi trabajo ahora con él, mientras con la mano le hacia una paja el primero, hasta que dijo que me quería coger, yo dude un poco pero entre los dos me agarraron y me acomodaron en una mesita, boca arriba y con las piernas al aire, el primero fue a otra habitación y salio con un gel lubricante que me unto en mi culo, y se dispuso a penetrarme, yo tarte de luchar un poco ya que el dolor era muy intenso y su verga ademas de larga era muy gruesa, sin embrago el segundo taxista me tomo fuertemente para que no me moviera, el dolor era muy intenso y con cada embestida sentía que me partía en dos, al parecer ellos disfrutaban con mi dolor y mis quejidos, pues entre mas me quejaba mas fuerte me penetraba, mientras que el otro me puso mi verga en la boca.
Después de un tiempo así el dolor desapareció y comencé a disfrutar de esa cogida, estuvimos así hasta que los dos terminaron al mismo tiempo, uno en mi culo y el otro en mi boca, pensé que eso había sido todo, sin embargo el segundo taxista todavía tenia ganas de seguir, por lo que me coloco en el sillón para que le dejara mi culito al aire y a su disposición, y comenzó a darme muy fuerte, yo disfrutaba al máximo ver sus caras llenas de placer, esta posición duro como una hora turnándose para meterme sus vergas.
Yo estaba agotado y no me daba abasto para mamar, mientras me perforaban el culo, el cual estaba muy dilatado y se mostraban algunos rasgos de sangre, y sin embargo no me importó y solo pedía mas y mas, hasta que me dijeron que me levantara y pusieron sus vergas a la altura de mi cara y descargaron toda su leche en mí, la cual no desperdicie y me trague toda hasta dejar muy limpias esas vergas en señal de agradecimiento por el placer que me habían dado, los tres terminamos muy cansados, por lo que decidimos darnos un baño y descansar un rato antes de salir de la casa, se hizo de noche y me llevaron a mi hotel, no sin antes quedar de vernos antes de que regresara a mi ciudad.

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